Aparte de ser reconocido por ser el padre de la teoría de la gravitación y de sentar las base para la mecánica clásica, Newton fue una mente inquieta que realizo grandes logros en múltiples campos lo que acabo convirtiéndole en uno de los más grandes científicos de la historia. Uno de estos trabajos menos conocidos fue realizado en el de la óptica y la naturaleza de la luz. Dentro de este marco vengo a presentar unos de los experimentos más bizarros con los que me he topado y que espero que no lo repitan.
A Newton le interesaba como la modificación de los rayos de luz podía dar lugar a ciertos efectos
perceptibles que le ayudasen a comprender el funcionamiento de estos. Pero cierto día decidió cambiar de estrategia. En vez de modificar los rayos que le llegaban al ojo, decidió modificar su propio ojo para observar como variaría la percepción lumínica. Así que ni corto ni perezoso decidió coger una aguja de las que se usan para coser cuero e introducirla por la parte baja del ojo en la cavidad que queda entre el ojo y la cuenca ocular. Para los que no se lo imaginen acompaño el esquema de Newton donde describe este experimento y sus efectos.
Newton describe que con la presión de la cabeza de la aguja aparecen unos círculos blancos y negros concéntricos (En las zonas del esquema donde están las letras r,s,t y c, arriba a la derecha). También menciona como estos círculos pueden ser modificados moviendo la aguja o el propio ojo. Por buena casualidad para él los efectos desaparecían al retirar la aguja y parece ser que no padeció secuelas.
Es una pena que no describa más de la situación experimental, no sabemos si lo hizo en una situación con luz o a oscuras, de ser esta última estaría creando imágenes artificiales gracias a la excitación de los fotoreceptores del tipo bastones (si atendemos al dibujo vemos como la imagen se forma prácticamente en la periferia del campo visual). Sin embargo es curioso que se formasen círculos concéntricos en vez de una mancha oscura total. ¿A quién se le ocurre una solución?.
Fuente: Deliciosa mente.
Me ha recordado a mi de chico, cuando tras frotarme mucho los ojos también veía circulos raros que se movían en los laterales, jeje. Pero esto es más chungo. Vaya friki este Newton, jaja, el tio se metía en el papel experimentando con su propio cuerpo (bueno, en realidad esto se hacía antes más de lo que parece)
ResponderEliminarSobre la solución ni idea...